Este sistema agro-comercial puede reducir grandemente la presión del pastoreo en pastizales degradados, además de mejorar la salud del suelo, retener agua, capturar y secuestrar considerables cantidades de CO2 y representa una alternativa que puede ser la diferencia entre supervivencia y pobreza absoluta para millones de pequeños productores y agricultores en el mundo habitando particularmente en zonas áridas y semiáridas. Las plantas de agave y árboles fijadores de nitrógeno, tienen la capacidad de reducir y aislar cantidades considerables de CO2 . También producen más biomasa sobre el suelo y debajo de éste, de manera continua más que cualquier otra especie desértica o semidesértica. Se estima que este sistema puede absorber y almacenar el equivalente en peso seco de 30 - 50 toneladas de CO2 /ha/año tanto sobre como debajo del suelo.
En plantaciones comerciales, el hijuelo se coloca de 3 años y a partir del 4 año y durante cuatro años más, el agave bien enraizado comienza a reducir y aislar cantidades considerables de CO2.
La veracidad de los estudios realizados a la fecha sobre la fijación de C02, se presentan en el PDF siguiente: